Actualizado: 01/06/2017
Los gestos técnicos carecen de importancia si no conseguimos desplazarnos en la pista correctamente para lograr la posición que nos permita ejecutar el movimiento correcto. El pádel es un juego de movimiento, donde el juego de pies cobra una importancia vital, por ello, se hace necesario aprender a moverse por la pista. Hay autores que afirman que alrededor del 60% de los errores que se cometen en un partido son causados por un mal movimiento de pies.
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Cuando se deja de entrenar o se juega de semana en semana, el gesto técnico en sí se mantiene, tu golpe de derecha o revés está en tu cabeza, pero lo que antes se pierde es el ajuste de los pies. No somos capaces de medir bien los pasos hacia la bola, que es, sin duda, la antesala hacia un buen golpe. Sin esta sincronización entre la trayectoria de la bola y tus desplazamientos en la pista, el juego del pádel carece de sentido.
Para mejorar en los desplazamientos, la concentración del jugador en la pista debe ser máxima. Los jugadores que no están atentos a la lectura del golpe del rival, a la trayectoria que va a describir la bola, y a su sincronización con el intercambio de golpeos, no podrá evolucionar en su juego. Esa es la mayor dificultad a la que se enfrenta un jugador de pádel, más allá de la técnica de golpeo, ya que lo que pretenden los rivales con los cambios de velocidad de golpeo, cambios de dirección, juego de alturas, juego corto, golpes angulados, etc. es hacer que se pierda la distancia a la bola y que se cometa un error técnico a la hora de golpearla.
Por tanto, los desplazamientos específicos en pista han de ser entrenados, ya que se utilizan durante todo el partido y son parte importante en la competición, porque de ellos depende en gran medida los errores que se dan en la misma. Aún así, la preparación específica solo se puede desarrollar eficazmente si el organismo ha sido sometido previamente a una preparación general.
Por ello, vamos a comenzar con unos ejercicios de desplazamiento básicos, para, posteriormente, ir añadiendo ejercicios de mayor complejidad. Sería interesante que los incluyamos en nuestros entrenamientos, o bien, realizarlos antes de jugar un partido, una vez hecho el calentamiento. Recordad, que se deben hacer con la máxima concentración y a una velocidad máxima. Recomiendo hacerlos con la pala en mano para trabajar de manera específica y simular, así, estar en situaciones reales de juego.
También os dejo un ejercicio para trabajar la propiocepción de toda la musculatura que interviene en los desplazamientos laterales. A modo casero, se podría realizar con las típicas colchonetas que nos encontramos en las salas de musculación, a las que habría que añadirle algún elemento deslizante, como puede ser agua con jabón, y realizar los desplazamientos sin calzado, con calcetines que se deslicen con facilidad.
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