El pádel es un juego competitivo y pese a que se aprende más rápido en comparación con el tenis, todos aquellos que empiezan a practicarlo pueden notar algunas dificultades. Tal como ocurre en cada deporte, siempre se deben estudiar las reglas y evitar los errores más comunes, los cuales no solo cometen principiantes, sino también algunos jugadores expertos.
Lo importante sobre los errores de técnicas más habituales en este juego es aprender a localizarlos, instruirse de ellos y perfeccionar las estrategias. Por ello, es importante conocer cuáles son los más comunes para evitarlos en las próximas jugadas y tener mayores posibilidades de ganar a los rivales.
Evita hacer estas 3 cosas.
En ocasiones los jugadores principiantes suelen confundir el pádel con el tenis, quizá por las similitudes en los elementos empleados. Esto los hace cometer muchos errores, sobre todo porque pese a lo anterior, cada juego también tiene sus diferencias.
También existen otros aspectos que pueden interferir en la calidad de las jugadas, y estos son los más comunes:
Mal agarre de la empuñadura.
Una de las nociones básicas del pádel es conocer cómo coger adecuadamente la empuñadura de la pala, tanto para evitar lesiones como para ejecutar mejor los movimientos al golpear la pelota. Aunque la mayoría de las veces suele ocurrir con los jugadores que tienen poca experiencia, en ocasiones el estrés, nervios y otros factores pueden afectar a los más profesionales.
“Se debe coger la pala con mucha seguridad, de forma cómoda y sin forzar la postura. Así, al golpear la bola, se puede concentrar en hacerlo con la mayor superficie posible”, aconseja el experto en deportes de la web Sincable, Omar Donalson.
Para los iniciados se recomienda coger la empuñadura con el agarre estándar, que sirve para la derecha como el revés. De este modo, se evita la preocupación por cambiar el sentido según la dirección de la pelota.
Movimientos lentos.
Si los jugadores pierden tiempo en golpear la pelota como en una pista de tenis, pueden desconcentrarse y descontrolarse. En vista de que el campo de juego del pádel es más pequeño, lo recomendable es realizar movimientos rápidos, con tiempos de reacción cortos.
Los movimientos veloces se obtienen con la práctica constante, en la que se entrenan tanto la visión periférica como el manejo de la presión y estrés, para alcanzar reacciones casi instantáneas.
Posición de espera.
Tras cada punto y antes de que llegue nuevamente la pelota, es importante concentrarse y colocarse en una correcta posición de espera. Para ello, se debe evitar tener la raqueta muy baja, es mejor mantenerla a la altura media del cuerpo, de modo que se pueda reaccionar en el menor tiempo posible.
Además de lo anterior, es un buen momento para reflexionar sobre lo ocurrido en la jugada anterior. En este caso, cabe preguntarse ¿No hubo suficiente flexión para lograr un buen golpe? ¿Se tomaron las decisiones correctas? ¿Es conveniente cambiar las tácticas?