Para mí uno de los secretos del pádel es la elección del golpe correcto en cada momento del partido. El que elige el momento y la pelota correcta para jugarla a una velocidad y ubicación determinada marca las diferencias en los momentos importantes; esta elección hace ganar o perder un partido y marca la diferencia de niveles entre los jugadores.
Normalmente el dilema de seguir metiendo bola o intentar ganarla llega en los momentos decisivos de cada juego… en los primeros puntos esta elección, por norma general, suele ser la correcta ya que no jugamos bajo presión. El problema viene cuando vamos con el marcador abajo, 30-30 ó ventajas a favor o en contra. Personalmente pienso que para minimizar esta indecisión cada uno de la pareja tiene que tener claro quién es el que tiene que meter bola y preparar el punto y quién es el que tiene que intentar definirla.
Una manera para trabajar este problema es entrenar jugando partido normal pero con la condición del que saca comienza perdiendo 0-30 y juegue así bajo presión y está obligado a pensar bien qué momento es el adecuado para jugarse la bola.
Resumiendo, siempre es mejor meter una bola más que no precipitarse y regalar el punto. Hay que ser capaz de esperar la oportunidad idónea, esa será la diferencia de elegir o no el momento preciso para jugarse el golpe ganador.
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