Actualizado: 21/09/2017
#padel @fbelasteguin
Jugaba al fútbol pero hicieron una pista de pádel cerca de mi casa y empecé a practicarlo como aficionado a los 10 años. A los 14 me fui a entrenar a Buenos Aires, a 350 km de mi pueblo, en un año debuté de forma profesional y al final se convirtió en mi carrera. Es muy gratificante para mí poder vivir del deporte pero tengo otras aficiones, me gusta la Economía y estoy acabando ADE en la Universidad Francisco de Vitoria. Magnifica entrevista realizada por los amigos de mercados21.es.
Precisamente, en una ocasión afirmó que de no haber sido jugador profesional de pádel hubiera sido economista y que devora la prensa económica…
Es un interés que me viene de siempre. Mi padre ha trabajado en banca toda su vida y mi madre es docente, de modo me inculcaron la importancia del estudio desde pequeño y en mi casa había a diario periódicos económicos. Me gusta dominar los conceptos de la Economía y me encantaría saber mucho más, aunque el tiempo me limita bastante.
¿Tiene algún libro de la disciplina de cabecera?
El último que he leído ha sido MBA personal, de Josh Kaufman, un autodidacta que defiende las experiencias de vida para aprender, y he disfrutado con él.
¿Qué grandes cualidades del deporte son aplicables al mundo de la empresa?
Soy un enamorado de la educación a través del deporte, porque te da valores que en la vida laboral sirven de mucho, como la constancia, el espíritu de sacrificio y de superación, el compañerismo… Los chavales que se forman en el deporte tienen ventajas cuando se introducen en el mundo del trabajo gracias a esos valores. Además, gracias a una vida dedicada al deporte puedes transmitir a otros una experiencia personal válida e interesante para ellos. En la vida deportiva estás acostumbrado a tomar decisiones en cuestión de segundos, es un hábito muy adquirido. En el pádel, en cada pelota que juegas: ¿la envío paralela, cruzada…? A lo largo de un punto, mientras lo disputas, tomas decenas de decisiones diferentes y sumar a esa práctica a la capacitación que se requiere para un puesto concreto es una combinación muy buena.
¿Le gustaría emprender cuando deje de estar en la élite?
En el momento en que no juegue más tengo claro que voy a seguir vinculado al mundo del deporte porque no quiero desaprovechar mi experiencia.
Reside en España desde 2001. ¿Cómo valora la actual situación económica, con medidas de ahorro que hasta el momento no están ofreciendo el resultado esperado?
Llegué cuando empezaba la gran crisis en Argentina, con el presidente De la Rúa huyendo en helicóptero de la Casa Rosada y un país hundido. Ahora, después de 10 años, resulta que la crisis está en España… Cuando abusas, al final lo pagas y tenemos que pagar por todos los excesos cometidos. El problema es que si la gente se ha acostumbrado a vivir de una determinada forma, es difícil recortar. Creo que nos espera una época de grandes sacrificios y que la única manera de poder seguir adelante es trabajando, trabajando y trabajando. Y si la jornada laboral era de ocho horas y ahora es de 12 pues habrá que aceptarlo, no hay otra fórmula para salir de esto cuanto antes y regresar a tiempos mejores.
¿Se atreve con la polémica entre los gobiernos de España y Argentina a cuenta de Repsol YPF?
Soy una persona a la que le encanta respetar los diferentes puntos de vista, pero si se es consecuente con los actos. Si se marca una línea hay que seguirla, no me merecen consideración los que van dando bandazos. Si hace 11 años se ha alabado la privatización de YPF y de otras empresas argentinas y pasado ese tiempo se decide expropiarlas por falta de recursos… Pues creo que está más mal que bien, pero sobre todo por no mantener decisiones anteriores, que es lo que menos me ha gustado del caso. Si las cosas van mal, vendo, pero si lo que vendí es una fuente de ingresos, lo recupero. No se puede querer tener siempre todo.
¿Es ahora más difícil conservar los patrocinios y lograr nuevos?
En mi caso he tenido mucha suerte con un apoyo continuo. El pádel no para de crecer entre los aficionados y la crisis es una gran oportunidad para mi deporte porque algunas firmas, al reducir su presupuesto, se han ido de otras disciplinas grandes y han apostado por el pádel. Eso sí, la llegada a la prensa nacional es aún muy limitada. Pero lo que encuentran en nosotros es que podemos jugar con clientes en eventos, algo que además nos gusta.
¿Qué talentos cree que asocian a su figura sus sponsors?
Pienso que después de tantos años Juan Martín Díaz y yo somos una marca dentro del pádel y por eso nos buscan, porque transmitimos una imagen fuerte y buena y somos cercanos… Pero cuando no juguemos más al pádel tendremos que trabajar, este deporte no te permite retirarte con la vida garantizada.
Después de 10 años como número 1, desmienten el dicho de que es difícil llegar pero más lo es mantenerse…
Tenemos detrás a un gran equipo médico, psicológico… Imagina lo que es estar con un compañero de trabajo todos los días tanto tiempo, pero hemos logrado formar ese grupo con un afán de superación muy grande. Lo que hemos conseguido no interesa porque ya es historia. El torneo más importante está por venir y el premio más importante que me llevaré cuando ya no juegue es haber entrenado cada día y cada minuto como si fuera el último, haberme exprimido al máximo. Tener la tranquilidad de que lo di todo no tiene precio. Y, si va bien, se disfruta el doble por el esfuerzo que supone.
¿Qué tiene que pasar para que el pádel se conozca fuera de Argentina y de España?
Engancha tanto porque es muy fácil. Alguien que no haya hecho nunca deporte se lo pasa bien. Otra de sus claves para mí es que lo juega mucho la mujer. En España es un boom ahora, pero hace ya 25 años que se juega. Maduró y ha explotado y eso mismo pasará en otros países, se necesita tiempo. Los medios se van acercando. Yo creo que nuestra organización debería invertir mucho más en comunicación para que se interesen. Ha sido un déficit y un error no hacerlo hasta ahora.
Deja una respuesta