Actualizado: 04/04/2021
Tradicionalmente, lo que más ha preocupado a un jugador de pádel y cualquier deportista en general es su condición física y las estrategias de juego a poner en práctica. Esto ha quedado obsoleto después de que se haya podido comprobar en múltiples ocasiones que dos personas con las mismas cualidades físicas y siguiendo la misma estrategia no tienen porqué obtener el mismo resultado deportivo.
En la actualidad, cualquiera que practique deporte de manera regular, aunque sea de manera amateur, tiene en cuenta consideraciones que van más allá del físico o la técnica. Una buena alimentación o una predisposición psicológica adecuada son fundamentales para tener éxito y no tirar la toalla al segundo entrenamiento.
Meditación en el deporte
Al oír la palabra “meditación” es posible que muchos salgan corriendo. Una cosa es tener en cuenta consideraciones psicológicas a la hora de practicar deporte, y otra convertirse en una especie de monje tibetano. Sin embargo, por muy ‘hippie’ que pueda sonar de entrada, lo cierto es que la meditación se está convirtiendo en una herramienta cada vez más utilizada entre los deportistas. Lleva un tiempo formando parte de las rutinas de quienes compiten con la mente, como los jugadores de poker o ajedrez, y eso que eran bastante reacios a creer sus resultados podían mejorar con algo más que no fueran sus habilidades innatas, pero se han tenido que rendir a los resultados. Más recientemente, la meditación está empezando a ser clave en el rendimiento de algunos deportistas de élite.
Tras ganar el Mundial de baloncesto, Ricky Rubio habló de la importancia que la meditación tenía en el buen momento profesional que vivía. Pero no solo eso, en la NBA, donde milita, incluso se ha llegado a desarrollar una aplicación con sesiones guiadas de meditación y consejos de jugadores que puedan ayudar a la gente de a pie a conseguir sus objetivos.
La meditación se practica desde hace siglos, pero ahora se está empezando a tener en cuenta como terapia, como fuente de salud y bienestar, del mismo modo que para estar sano se recomienda hacer algo de ejercicio y comer fruta y verdura cada día.
Qué aporta la meditación al deportista
Meditar tiene que ver con tener conciencia de uno mismo, con desconectar del entorno y con el equilibrio emocional. Cualquiera de estas cosas es beneficiosa para alguien que compite. Un deportista tiene que lidiar con varios frentes; se enfrenta a sus rivales, pero también a sí mismo, y además se enfrenta a situaciones que están fuera de su control. La meditación es una herramienta que ayuda a estar preparado para poder gestionar mejor todos estos frentes.
Uso de la respiración
Uno de los pilares de la meditación es el control de la respiración. Respirar es algo que se hace de manera instintiva, sin tener conciencia de ello. Pero ser conscientes de nuestra respiración nos puede ayudar a cambiar situaciones adversas. En estados de estrés, nuestro pulso y respiración se aceleran. Darse cuenta de ello y saber cómo trabajar para que nuestra respiración vuelva a su estado normal, hará que los niveles de estrés disminuyan.
Preparación
Unos minutos de meditación antes de enfrentar un partido pueden considerarse una de las mejores técnicas para entrar al 100% mentalmente. Nos ayuda a focalizar y centrarnos en aquel objetivo que queremos alcanzar, sin dejarnos “marear” por posibles escenarios catastrofistas antes incluso de que lleguen a suceder.
Además, está comprobado que la meditación es un excelente bálsamo para aquellos que tienen dificultades para dormir. Un buen descanso es fundamental para el buen rendimiento del deportista, tanto a nivel físico como psicológico.
Recuperación
Hay deportistas que meditan después de haber competido. Esto les ayuda a “resetearse”. Lo que haya pasado en la pista, sea bueno o malo, queda ahí. De este modo podremos analizar nuestro juego cuando estemos en mejores condiciones de pensar de manera racional y podremos hacer mejores valoraciones.
Mejora del rendimiento
Otro de los aspectos con los que trabaja la meditación es la visualización. Tener la capacidad de centrarse en una idea de manera exclusiva ayuda a materializar dicha idea. Si uno se imagina ganando, es más fácil que gane.
Aumento de la confianza
El autoconocimiento y una correcta gestión emocional nos harán sentir mejor con nosotros mismos. Saber reconocer aspectos positivos y negativos de nosotros mismos nos ayudará a potenciar unos y corregir los otros. Del mismo modo, saber gestionar nuestras emociones, mantenerlas bajo control, evitará en muchas ocasiones que todo el esfuerzo físico y la práctica diaria no sirvan de nada por habernos dejado llevar por los nervios o por un ataque de ira.