Tras el anuncio de su último cambio de pareja, hemos tenido la oportunidad de saber como se encuentra a estas alturas de temporada Alvaro Cepero, que le depara el final de 2014 y como esta planificando la nueva temporada 2015.
Para empezar, me gustaría que nos hicieras un resumen de esta temporada con tantos cambios de pareja y los motivos que te conducen a esta decisión.
La temporada no está siendo lo buena que yo esperaba, y más tras el buen sabor de boca que me dejó la pasada con la semifinal alcanzada en Argentina. La “Diosa fortuna” está siendo cuadros bastante injusta conmigo con unos cuadros durísimos, ¡hasta nueve cabezas de serie en primera ronda!, pero bueno, aquí no puedo hacer nada. En cuanto a los motivos, no existe un único motivo para cambiar de pareja, es un cúmulo de circunstancias que en muchas ocasiones son circunstanciales, sensaciones difíciles de describir, pero siempre se hace con el mismo objetivo: ser más y más competitivo.
Acabas de anunciar que tu nuevo compañero será Javier Escalante. Háblame de esta decisión.
La decisión de jugar con Javier estaba tomada para el 2015, pero las circunstancias han hecho que se precipite todo a este final de temporada. Por una parte es muy positivo ya que tendremos más tiempo de acoplarnos. Por otra parte un poco triste de tener que terminar prematuramente el proyecto con Marcelo, el cual se portó muy bien conmigo y me animó a aceptar la propuesta de Escalante.
¿En qué ha cambiado Álvaro Cepero en estos últimos años?
Evidentemente experiencia. He tenido la oportunidad de trabajar con los mejores entrenadores del mundo, compartir pista con los mejores jugadores, y crecer como jugador. He cambiado mis hábitos diarios tanto alimenticios, horarios, así como mi plena dedicación a entrenar tanto la parte de pádel como la física. El pádel lo considero mi profesión, y como tal trato de comportarme como un profesional en todos los ámbitos que rodean a este deporte, aunque me queda muchísimo que aprender.
¿Qué es lo mejor y lo peor del pádel profesional?
Lo mejor evidentemente es poder vivir de lo que más le gusta a uno, y yo soy un privilegiado al poder dedicarme exclusivamente a este deporte. Lo menos bueno es ver cómo no acabamos de conectar con el gran número de practicantes que juegan al pádel. Creo que es algo que debemos trabajar entre todos, y de lo cual todos somos responsables y saldremos beneficiados si se consigue que el pádel profesional llegue a más gente.
¿Cómo ves el panorama profesional con tantos cambios de pareja?
Creo que desde todos los puntos de vista, es algo muy positivo que haya habido tantos movimientos en las parejas de arriba. Será bueno para el espectador con nuevas parejas que tendrán nuevos patrones de juego, resultados más inesperados, y a priori, sin una pareja claramente favorita como estos últimos años. Al resto, también nos motiva más el saber que existirá un periodo de adaptación para todas las parejas, que dará más emoción si cabe al próximo año, lo que nos ofrece más opciones a todos.
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